Resucitó
Hemos pasado cuarenta días en espera de este momento, el gozo de no ver el cuerpo del Señor en la tumba, verdaderamente ha resucitado, se ha quitado los lienzos que ataban su cuerpo a esta vida terrena, se ha levantado y ha salido, una vez más a buscarnos, y ha empezado por las mujeres, ellas son las primeras que reciben la Alegría del Evangelio: Dios cumple sus promesas y nos ha vuelto a la vida a Jesús. Pero, ¿a qué clase de vida ha vuelto el Maestro?. Cristo no se quedó aquí en la tierra: nació, creció, vivió, sufrió, murió, y lo más importante, RESUCITÓ, sin embargo ya no está con nosotros como uno más, ya no podemos verle como lo hacíamos antes, ya no es carne, ahora es sólo Espíritu, y es ése Santo Espíritu el que ha venido sobre nosotros para abrirnos los ojos y podamos entender, a la luz de la fe, sus enseñanzas. Tú y yo hemos resucitado con Él, ya la muerte no tiene dominio sobre nosotros pues creemos en Aquel que ha vencido al pecado, por eso tenemos el deber-invitació...