Errores en la oficina
Yo tampoco me quise dejar llevar por la presión del trabajo y esas cosas que nos vuelven locos si nos dejamos porque ya había hecho antes ese puesto así que comencé con mi actitud de "yo me sé esto".
Las primeras dos semanas todo bien, cero errores, sin inconvenientes con los clientes, me la estaba comiendo, como decimos en el argot popular. Pero ocurrió que ya la tercera semana empecé a cometer errores: uno, dos, tres...con consecuencias, corrigiendo volvía a equivocarme; en fin, las últimas dos semanas de la suplencia fueron fatales, anímica y profesionalmente porque me molestaba equivocarme por las consecuencias, porque podía hacerme mala imagen...y por ahí seguían mis pensamientos, tanto así que llegué a la conclusión que da origen a esta publicación.
¿Por qué me molestaba equivocarme? A nadie le gusta cometer errores pero qué era lo que realmente me molestaba ¿mi conciencia y ética profesional o que iban a hablar mal de mí? ¿pesa más el concepto que tengo yo de mí o el que los demás puedan tener? O sin tanto rodeo, me molestaba cometer errores por el qué dirán, y no voy a condenar esta actitud pero llama la atención lo triste que es vivir por cuidar una imagen o por agradar a otros en lugar de actuar conforme a los valores recibidos.
Darme cuenta que estaba cayendo en esto me animó a levantarme, me equivoqué ¿y? eso puede pasarle a cualquiera, sólo Dios es perfecto y la única forma de aprender es equivocándose, "nadie aprende por experiencia ajena" dice la sabiduría popular y "echando a perder se aprende" la de un compañero de la universidad.
"Errar es de humanos y corregir de sabios" y otras tantas frases motivacionales y reconfortadoras que mi supervisora me dijo para que no cayera yo en depresión o en un exceso de crueldad conmigo. ¿Que en el trabajo me van a evaluar mal? Puede ser, pero ¿cómo está mi conciencia? Respetando y valorando el lugar donde laboro, lo más importante es que al final del día yo pueda irme a dormir sabiendo que hice todo bien y si me equivoqué corregí oportunamente.
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