Corpus et anima

Hace unas semanas estuve (obligado) de reposo por una lesión en la columna que me causaba mucho dolor físico y mucha impotencia y rabia por sentirme limitado para hacer las cosas que estoy acostumbrado, estar sentado o acostado o parado mucho rato me causaba dolor y caminar distancias, para mi normales, dolía mucho. Las dos semanas que me vi en este escenario pensé en lo que le da título a esta publicación: cuerpo y alma. ¿De dónde surgió? yo estaba más preocupado por recuperar la salud física y no me daba cuenta, o peor, no le daba importancia a lo que veía que estaba ocurriendo en mi alma. Por esos mismos sentimientos tan tontos había caído en una sequedad espiritual, no culpaba a Dios de lo que me había pasado sino que peleaba con Él porque no me estaba recuperando al ritmo que yo quería. El motivo de mi apuro es el más absurdo del mundo: tenía que ir a trabajar. Lo se, lo se, primero mi salud que el trabajo peeeroo yo no lo estaba viendo en ese momento, le estaba dando cabi...